Manifiesto contra visual


Resumen: El siguiente texto pretende abordar un paralelo entre la condición de discapacidad tomando como eje los diseños web y la condición de género para evidenciar cómo asuntos de lenguaje, arquitectura, diseño, Estado y demás variables son excluyentes.

Palabras clave: Discapacidad visual, género, sexual, diseño web.
Un fulano le pregunta a otro en una video charla por Skype ¿Que quién soy yo?.. El otro personaje le contesta: Realmente no lo sé; su voz me sugiere algunas cosas. Ahora usted por favor, -contra pregunta el segundo personaje-, dígame quién soy por lo que ve a través de esa pantalla… Además si lo que ve le permite definir o modelar alguna respuesta, por favor no dude en decírmela porque si

usted me pregunta lo mismo hacia usted basado en la sola apreciación, mi respuesta es clara: no lo sé; no lo veo, no logro dibujarlo por su apariencia; no logro ver los colores que connotarían algo y pareciera que esa, la condición visual es la que se ha convertido en decididora (Lyotard) de la identidad. De hecho, la identidad tiene una carga visual imponente… Luego las costumbres. 

Solo al final aparece el sonido, el olor, la forma táctil, el sabor; estos últimos sentidos, mi estimado amigo de voz grave (Supongo que es un amigo por el tono de su voz), no han sido tenidas en cuenta en el diseño de esta interfaz que permite comunicarnos estando tan distantes geográficamente. Internet no tiene olor, no tiene forma plástica ni un sabor que me permita visualizar con quien estoy hablando por esta página web. Lamento no poder ayudarlo. Soy ciego y todo parece indicar que al igual que usted, necesitamos de otra persona para que nos ayude a definir quiénes somos…
Además amigo Fulano permítame decirle que lo entiendo en su preocupación. Perdone si utilizo términos que signifiquen humano macho, pero es lo único que puedo decir cuando su voz y la picardía del lenguaje así lo determinan. Todo está confabulado contra personas como usted y yo. Desde la palabra que parece una ultra conservadora madre de solo hijos varones que imponen su ley en el territorio de la lengua, aquella valiente mujer que busca sobresalir entre tanto ‘término’ que alude solo a definir la condición fálica. En este caso me pasa algo similar, pues si le parece Fulano, todo lo que se dice pareciera que está escrito, mencionado y publicado para quienes ven y poco para quienes imaginamos… Lo más extraño es que el solo hecho de mencionar la imaginación es traer una carga semántica de imágenes que refuerzan el sentido de la vista. Es como si en su caso le hablaran del baño para mujeres que buscan la manera de orinar de pie. Todo busca definirse por una costumbre milenaria masculina.
tomado de: https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjiYj6mg-Km1ZksE1EhwjoiUt8YBkZInpOAQnLczwuufoH8drCEsKbuQfLcyJy1BW8nntmdYxRnehf8nflpaTPbBe-xRrcnX16j2aPPzMaySkT4bHiQLQ0ZD0rmJvk4ssHYpCQc1GdLIWE/s400/F677349_vagina330.jpg

No imagino la suerte de alguien que esté en condición de discapacidad visual y quien además tenga cuerpo de mujer y le gusten las mujeres. Vaya ironía. ‘Evidentemente’ las hay y sus problemas no acaban si además mencionamos algunas prácticas tecnologizadas como utilizar un servicio de chat vía web e intentar domar esa bestia de la imagen digital. Aquí ocurren varias cosas:
  1. Tiene la obligación de entender y asumir la primera derrota con algo que no está hecho para ella, pues se habla de tecnología que ha sido desarrollada por el hombre para los hombres. Las mujeres que lo entienden es posible que piensen como hombres, según dicen los mismos hombres quienes posiblemente sean parte de esas culturas urbanas de homosexualismo.
  2. Es una interfaz gráfica dotada con toda la magia del hipertexto en una pantalla que desconoce el braile y utiliza una voz masculina para guiarla torpemente por la escena virtual.
  3. Su elección de género (Pensemos que por lo menos eso sí pudo escoger) le pone otro nivel de preguntas: ¿Quién verá en ella a una compañera ideal? O será que nuestra amiga lesbiana y ciega prefiere no escoger entre los olores humanos y es por eso que busca la web, intentando poseer la condición cyborg como organismo cibernético, pues es posible que su relación tecnologizada y tecnicista lo puedan convertir en un ser neutro? Una máquina ciega… Fíjese que hasta el mismo lenguaje le juega una sucia pasada: máquina, palabra femenina… Ella podría ser un máquino cegatón.
Le digo que lo entiendo porque usted y yo tenemos algo en común: yo soy ciego y vivo en un mundo visual y usted al parecer no sabe quién es y vive en un mundo machista que no permite la duda. Ambos sobrevivimos en la sombra buscando la manera que nos reconozcan y nos valoren por lo que somos, por nuestra vida. Es posible también que usted viva en un closet oscuro con la puerta entreabierta.
Tomado de: http://3.bp.blogspot.com
Ya se habrá dado cuenta lo difícil que es caminar por este mundo. En su caso, las miradas y los clichés mediáticos serán sus antagonistas permanentes. En mi caso esos mismos fenómenos imponen todos los días cómo debo (debemos) vivir en un mundo hecho para hombres visuales. Hasta la arquitectura se ufana de ser masculina con un nombre femenino. Casi no hay lugares inclusivos para usted y para mi; para caminar y no tropezar debo tener en mano un bastón lazarillo que ‘escanea’ el ambiente para detectar peligros. Es su caso Fulano, será un pene el que defina si los sitios son aptos o no. Desde luego si usted no tiene uno propio o desea entregarlo, habrá contemplado la idea de reemplazarlo. Tal como lo menciona Preciado en su manifiesto contra-sexual, hasta su brazo puesto en el teclado es posible que sea parte de una creación fálica que excita a la máquina. A mí me toca excitar el piso, el suelo, la calle con mi bastón para que me deje seguir sin caer.
Fulano, aprovechemos que nos estamos conociendo y ayúdeme a proponer algunas reglas de juego para que en mi condición por lo menos este aparato y la información sea más fácil de domesticar.

Le propongo un decálogo contra-visual así:

  1. Todos los computadores deben tener una versión de teclado braile adicional al teclado tradicional. Esto en su caso es como si dijéramos que el dato género en los formularios se pudiera seleccionar una opción doble o algo así que diga “Todos los anteriores”.
  2. Cuando se hable de navegar en la web, se debe hacer sin mouse o puntero porque yo no lo veo y me cuesta identificar lo que muevo en un tapete y lo que hace en pantalla. Para usted sería como si el decálogo mencionara que las vergas no definen el sentido del poder en la sociedad porque ya todos tienen una representación fálica en sus cuerpos y si lo tienen todos los seres humanos entonces ya no es relevante.
  3. Los gráficos en internet ya no serán gráficos solamente; a partir de este momento también serán sónicos, olóricos y sabóricos. En su caso el tema se podría comparar como que desde ahora no se hablará solamente de hombre/mujer; se harán las debidas descripciones tonales de lo que hay entre blanco y negro. En resumen, debe hablarse también del gris.
  4. En todos los diseños web debe haber una programación de etiquetas descriptivas por una voz deshumanizada. Supongo que a usted le gustaría que ese tono de voz fuera neutro… Tamaña solicitud.
  5. Los diseños web deben contemplar la posibilidad del tacto más allá del teclado u otros dispositivos. Esta será una responsabilidad de las pantallas. En cada toque debe haber una vibración diferente que nos ayude a entender en dónde estamos parquedados. Para su caso Fulano, será como si dijéramos que la vulva tendrá el mismo protagonismo para obtener placer individual todo basado en el tacto. De hecho cuando lo pienso, la vagina parece un mouse y se utiliza como tal… Lleguemos a un acuerdo: que el mouse digital sea más una vagina digital que exita la navegación web.
  6. Sitios como Google, Youtube y otros conocidos, tendrán que renovar todo su esqueleto de servicios y deberán incluir a la población en condición de discapacidad visual como usuarios netos. Casos como los mapas de Google deberán tener un sentido real de ubicación, no solo de apreciación. Supongo que esto se parece mucho a que en la iglesia, el ejército y otras instituciones reconocidas, dejen la libertad de identidad.
  7. Ironías como las gafas de Google tendrán que tener instalados sistemas de detección que permitan potenciar el escáner de mi bastón para no caerme en los andenes. Le propongo Fulano que este séptimo código lo dediquemos a que las parejas de significantes como faldas y los pantalones; azul y rosado; María y José; plancha y televisor sean abolidas completamente del imaginario sexual.
  8. No se permite el uso de animaciones en lenguajes como action script de flash. Todo debe ser html5 o algo que permita la selección de contenidos y la posterior interpretación para todos. En el otro tema hablamos de mirar sin juzgar. Si se ha de mirar, solo se permite la mirada directa a la entrepierna.
  9. La creación de sitios y páginas web estará definida por el código para que estemos todos. Usted lo entenderá como que ya no debe haber baños para hombres y mujeres… Solo deben haber baños.
  10. Los sitios web deben ser diseñados incluyendo las pruebas con personas que tienen el rol de usuarios finales ciegos para que el producto final sea incluyente. Para usted Fulano, esto sonará algo así: Si el Estado ha de tomar decisiones que afecten positiva o negativamente el tránsito diario de la vida, deberá preguntar a todos sin detenerse en preguntas ‘maricas’ de género.
De todas formas amigo Fulano, en esto andamos los dos y creo estratégico que nos acompañemos. El futuro no dirá si fue posible o no, entre tanto como dijo otro primo que es ciego: amanecerá y veremos. A usted le aplica algo así como En la variedad del closet dormiremos…


Bibliografía
Preciado, B. (2002. Manifiesto contra-sexual. Ed. Opera prima. Barcelona.
Gutiérrez, A. (2012). Diseño y tecnología: aproximaciones de género en estudiantes de diseño industrial. Revista S&T, 10(22), Memorias: 5o Encuentro Internacional de Investigación en Diseño - Diseño + 2012, 69-79.
Haraway, D. (1984). Manifiesto Cyborg. El sueño irónico de un lenguaje común para las mujeres en el circuito integrado. University of California, Santa Cruz.
Introducción a la accesibilidad web. http://www.w3c.es/traducciones/es/wai/intro/accessibility

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